World
La Transformación Económica de China: De la Esperanza al Descontento
Explora la evolución económica de China desde el optimismo inicial hasta el descontento actual. Analiza los factores clave que han influido en este cambio y cómo han afectado a la sociedad y la política del país en los últimos años.
En el año 2004, cuando la economía china comenzó a emerger como una potente fuerza global, un grupo de investigadores se embarcó en un ambicioso proyecto: realizar encuestas a gran escala en todo el país. Estas encuestas tenían como objetivo indagar en la percepción de los ciudadanos sobre su situación económica, preguntándoles si, desde su punto de vista, se sentían más prósperos que cinco años atrás.
Los resultados iniciales fueron alentadores; el porcentaje de personas que se sentían más adineradas experimentó un notable aumento. Al cabo de cinco años, esta percepción continuó creciendo y, en 2014, alcanzó un sorprendente 77 por ciento. Sin embargo, la tendencia comenzó a cambiar drásticamente en años posteriores. En la encuesta realizada el año pasado, solo el 39 por ciento de los encuestados afirmaron sentirse mejor en términos económicos, lo que refleja un cambio significativo en el optimismo colectivo.
Los hallazgos de esta encuesta, titulada “Salir adelante en la China actual: del optimismo al pesimismo”, revelan una nueva y preocupante realidad. La economía china se enfrenta a una crisis sin precedentes desde su apertura al mundo hace más de cuatro décadas. El tan esperado repunte tras la pandemia de COVID-19, que se esperaba que revitalizara la economía nacional, ha sido mucho menos significativo de lo anticipado.
En un esfuerzo por diversificar su economía, hace algunos años, Pekín tomó la decisión de reducir la dependencia del sector inmobiliario, que había sido un pilar fundamental para el ahorro de las familias, así como para la estabilidad del sistema bancario chino y las finanzas de los gobiernos locales. Sin embargo, esta estrategia ha tenido consecuencias imprevistas, ya que el sector inmobiliario ha caído en una profunda crisis.
- Los grandes promotores de bienes raíces se han visto obligados a cerrar sus puertas.
- Esto ha dejado a su paso enormes deudas y un legado de inversiones fallidas.
- Además, muchas propiedades permanecen sin vender y miles de puestos de trabajo se han perdido.
Así, lo que una vez fue un símbolo de crecimiento y prosperidad se ha convertido en una fuente de incertidumbre y pesimismo para la población china.