Trágico Accidente en el Museo Hecht de Israel: Vasija de 3,500 Años Rota

Un Incidente Trágico en el Museo Hecht de Israel

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Una vasija antigua, utilizada para almacenar aceite y vino durante la Edad del Bronce Medio en la histórica región de Canaán, ha sobrevivido por miles de años antes de ser expuesta en el renombrado Museo Hecht de Israel. Sin embargo, la curiosidad infantil la llevó a un destino desafortunado la semana pasada.

El viernes, un niño de tan solo 4 años, que visitaba el museo acompañado de sus padres, intentó asomarse al interior de la vasija de 3,500 años de antigüedad para descubrir qué secretos guardaba. Según explicó su padre, en un momento de inocente curiosidad, el niño tiró ligeramente de la vasija, lo que provocó que esta se deslizara de su soporte metálico y se rompiera en mil pedazos al caer al suelo del museo.

El Museo Hecht es conocido por su enfoque innovador, que permite a los visitantes admirar sus valiosas piezas arqueológicas sin la barrera de vitrinas de vidrio ni cordones que las protejan. Este método proporciona una experiencia única y cercana, que muchos consideran que tiene “un encanto especial”, ya que permite a los visitantes sentir la conexión directa con los artefactos históricos, casi como si estuvieran manipulando esos objetos en la antigüedad.

Este enfoque refleja la visión de su fundador, Reuben Hecht, quien creía en la importancia de la interacción directa con la historia. Sin embargo, la vasija, que databa de entre 2200 y 1500 a.C., se vio expuesta a un imprevisto que nadie había anticipado. Esta jarra es anterior a las épocas del rey David y su hijo, el rey Salomón, y sus características son similares a otros objetos atribuidos a la antigua Canaán, una región que abarca lo que hoy conocemos como partes de Israel y los territorios palestinos.